"Lo cotidiano se levante hasta el plano de la belleza."


11.07.2012

El micrófono

Les presentamos a un gran compañero de las lides pedagógicas del futuro: el micrófono.
Este amable impulsor de la expresión oral siempre viene acompañada de requisitos tecnológicos que llaman la atención de los niños.
Un adulto amable y dispuesto puede reforzar el gusto por la tecnología, el sonido y el oficio de técnico del escenario.



 Nada más entretenido que organizarse para armar un espectáculo.
¿Quién va a cantar? ¿Quién va a hacer música? ¿Quién va a leer un cuento?


El que presente tiene que saber hacerlo; llamar la atención del público...


...expresarse de la manera adecuada...


...esgrimir la precisa medida entre humor, respeto y emoción...


...pues los artistas merecen reconocimiento y aprobación. 
Es altamente satisfactorio para ellos y ellas contar con un público atento. 


 
Cantar frente a todos requiere de la mayor concentración.


Al principio puede costar dominar los nervios, la sensación de ridículo puede atacar la autoestima, pero el miedo es el gran enemigo de la creatividad, vencerlo es primordial para pasarlo bien arriba del escenario... 


...dejarse llevar por las emociones, hallarle sentido a las palabras que nacen bien adentro, quizás en el corazón mismo, poder expresar con la música todo aquello que las palabras apenas logran transmitir... 


...¡y pasarlo estupendo!
Ser el centro de atención por una vez, elevarse en el cotidiano al plano de la belleza y sorprender a todos con lo bien que lo hacemos.


Es increíble observar cómo el modelo de un animador con micrófono que refuerza positivamente a sus compañeros puede aportar en la convivencia, el respeto y el enriquecimiento del vocabulario. Recomendamos plenamente su práctica en la educación formal e informal.
Con ustedes el gran, el inigualable cuentista elquino, imitado pero jamás superado, el fabulador cuya fantasía ya es legendaria: Joaquín!


Un gran aplauso para Joaquín quien nos presenta un cuento de su propia factoría:


El papel del educador es de mediador, modelo y, sobre todo, atento escucha. 
Si su reforzamiento es, además, positivo y sincero, habrán muchas posibilidades de que tengamos un niño a quien le hará sentido ocupar y compartir su imaginación y sus capacidades intelectuales.